El dolor a la hora de dar el pecho es una de las principales causas, sino para descontinuar la lactancia materna, que hacen que las primeras semanas después de dar a luz se hagan especialmente cuesta arriba. Y es que la lactancia no debe de doler, pero es casi inevitable tener los pezones muy sensibles y por lo menos doloridos en esos primeros días.
A continuación, se presentamos varios casos clínicos reales donde madres han experimentado una disminución del dolor notable en muy poquito tiempo y han podido continuar con la lactancia. Es más, como eran madres con grietas, también se muestra el proceso completo hasta que la grieta se ha curado. Todos ellos han sido recogidos en la consulta de una experta IBCLC en lactancia materna así que en paralelo mientras se curaba la grieta por el efecto de NURSICARE también se trataba a las madres para resolver la causa que originaba la grieta.
Un mal agarre y un sacaleches conlleva grietas y congestión mamaria
Anna es una mamá de 30 años que llegó al consultorio cuatro días después de su primer parto con dolorosas grietas en ambos pezones debido a un mal agarre. Ante la incapacidad de amamantar había pasado a usar un sacaleches, lo que también le provocaba intenso dolor debido a las grietas y la congestión mamaria que padecía. Al no poder extraer suficiente leche, comenzó con lactancia mixta. Solamente se trató con Nursicare.
La sensación de dolor disminuyó notablemente en apenas 24 horas: de 10 en una escala de 10 pasó a 3 al día siguiente. El uso de Nursicare terminó a los 4 días cuando el dolor era ya inexistente.
Bebé con frenillo causa congestión mamaria y grietas
Johanna de 30 años acudió a consulta después del nacimiento de su segundo niño con congestión mamaria, grietas y su bebe ictérico. Johanna daba por supuesto que se estaba realizando una correcta lactancia, pero en realidad no había transferencia efectiva de leche (ver foto 1 abajo) debido al frenillo corto (grado II) que tenía su bebé y que se solucionó con cirugía.
El dolor que Johanna tenía lo describió como “inaguantable” (de 10 sobre una escala de 10) al inicio del tratamiento. Solamente dos días después de estar usando Nursicare la sensación de dolor era de una décima parte. El tratamiento terminó 3 días después sin ninguna sensación de dolor.
Dolorosas grietas causadas por bebe con frenillo
Michele es una madre de 34 años con un dolor agudo en ambos pezones y un bebé con frenillo corto (grado 3). El problema del frenillo se solucionó mediante cirugía y las grietas de los pezones se trataron exclusivamente con Nursicare.
Al inicio del tratamiento, la sensación de dolor era de 8 en una escala de 10 y disminuyó a 2 sobre 10 a los 3 días de tratamiento. El tratamiento termino a los 5 días cuando el dolor era inexistente.
Madre con reducción de mamas y bebé con frenillo
Kate es una madre de 34 años que vino a vernos después de su primer parto con grietas e intenso dolor en ambos pezones. Kate se había sometido a una intervención quirúrgica de reducción de mamas y le habían avisado que probablemente no podría dar el pecho. Vino a nuestra consulta cinco días después del parto. Su bebé tenía frenillo corto (grado 3) que se resolvió mediante tratamiento quirúrgico.
Usando únicamente Nursicare como tratamiento para el problema en sus pezones, notó una reducción sustancial del dolor y mejora de las grietas en pocos días mientras continuó con la lactancia de forma exclusiva.
